¿Qué es lo que necesitan los hijos desde la paternidad consciente?

Los planteamientos de la  Dra. Shefali, experta en la materia, han tenido una gran acogida en las familias, porque ella habla de una visión muy innovadora en cuanto a la educación que requieren los niños hoy en día,  para llegar a la adolescencia y por supuesto a la vida adulta, con recursos emocionales que le permitan valorarse,  honrarse sabiendo que su identidad no la determinan propiamente los demás.

Este aspecto en la adolescencia es de vital importancia, porque cuando un chico conoce su valor y no requiere de la aprobación de los demás, sabe que no necesita involucrarse en temas de adicciones, alcoholismo, tabaquismo, o sentirse presionado por iniciar una vida sexual activa sin tener la claridad para ello, sólo por ser parte de los grupos de amigos o compañeros en los que se desenvuelve.

La Dra. Shefali  hace referencia a que en contraposición al control y al miedo con el que muchas veces los papás expresan su autoridad, con la intención de evitar conflictos durante la etapa de la adolescencia con sus hijos, se encuentra la conexión, reconoce que de acuerdo a los paradigmas establecidos pareciera más difícil, sin embargo, cuando se enseña a los hijos desde pequeños a tener esa conexión consigo mismo, con papá, con mamá,  es más simple ir estableciendo límites conscientes, en ese marco de conexión con sus necesidades muy personales. Hace énfasis en la importancia de aprender a conocer a cada hijo con sus propias peculiaridades.

Lograr esto requiere inicialmente de un autoconocimiento profundo por parte de los padres y en este sentido hay un aspecto con el que coincido plenamente con la Dra.  Shefali, porque he tenido la oportunidad de observar durante toda mi trayectoria como psicóloga, brindando psicoterapia,  que cuando los papás sanan sus heridas más profundas, el impacto en toda la familia es altamente positivo. 

La Dra.  Shefali menciona justamente que “el primer niño a atender es el niño herido que todos llevamos dentro”

Afortunadamente siempre es un buen momento para retomar este trabajo interno que te permite mejorar tu vida familiar.

La plasticidad y resiliencia de los chicos facilita la recuperación de un vínculo saludable. Esto quiere decir que ellos tienen la flexibilidad y la fuerza interna para seguir adelante con nuevos modelos, nuevas creencias, nuevas formas de relacionarse. 

Sólo se necesita la disposición y buena voluntad de la mano de un experto, para empezar a hacer esa transformación personal necesaria que garantice una relación en armonía, tal vez hemos escuchado esa frase trillada que “no se puede seguir haciendo lo mismo queriendo obtener resultados diferentes”. Esto es definitivamente cierto, la buena noticia es que pequeños cambios cada día, van haciendo paulatinamente la gran diferencia. 

Ahora bien, ¿cómo se logra la conexión?, con atención plena en el momento presente, aprender paulatinamente a reconocer cómo me estoy sintiendo, con qué creencias estoy educando a mis hijos, esto es conectar con mi ser interno, por eso la importancia de que cada uno de nosotros sane esas heridas de etapas anteriores de nuestra vida.

Como puedes ver, trabajar en la relación consigo mismo es sin duda de las mejores inversiones, su impacto pasa por todas áreas de nuestra vida.

Y tú.....?, estás lista para dar ese primer paso a la sanación de tus heridas emocionales, para dar el salto a tu nueva vida en armonía con tus hijos?

Abrazos

Glendy